domingo, 22 de abril de 2012

RECORTES, REFORMAS Y FALACIAS.

¿Cómo nos encontraremos la educación pública dentro de cuatro años? Al paso que lleva el actual Gobierno será difícil de reconocer. Cada día conocemos una nueva noticia sobre recortes: aumenta la ratio, disminuye el número de profesores, bajan la asignación de los centros, suben el precio de las tasas universitarias, reducen becas... Todo ello aderezado con declaraciones que producirían risa si no estuvieramos en un terreno tan importante y tan sensible. Ahora sabemos que eso de ir al extranjero para aprender idiomas es una tonteria porque aquí podemos hacer una inmersión lingüística tan buena como en el mismo Londres (BOE 12 marzo), o como el argumento del Ministro de Educación, el Sr. Wert, para justificar el aumento del nº alumnos en las aulas; según él esta reforma no debe ser tan mala puesto que uno de los objetivos de las escuelas es que los niños "se relacionen y socialicen, y naturalmente, si hay cincuenta se relacionarán con más niños que si hay veinte. Podríamos darle algunas ideas:  pueden reducir el gasto de calefación porque las clases más llenas estarán más calentitas, o darles a los niños y niñas solamente agua  en los comedores escolares para reducir la obesidad infantil...

Os recomiendo la lectura del siguiente artículo de Enrique Javier Díez Gutierrez,
  Las reformas neocon del ministro Wert “Educación de desastre” 
     en el que se analiza todo este proceso:
"Todas las reformas y recortes en educación apuntan de forma persistente a recortar la extensión del derecho a la educación pública para toda la ciudadanía, garantizada por el Estado. Ya lo proclamaba la OCDE en 2001: “los programas educativos no pueden ser diseñados como si toda la población escolar fuera a alcanzar sus niveles más altos”. Se ha producido una mutación en la concepción de este derecho: si durante años la educación fue una causa social, ahora la conciben como un imperativo económico, al servicio de la economía y de su competitividad (Laval y otros, 2002). La formación y el conocimiento se convierten en un bien privado, en una ventaja competitiva para insertarse en el futuro mercado laboral. Las nociones de igualdad, emancipación y democracia han sido remplazadas por un discurso de excelencia, competencias, autonomía financiera y reducción de costes. Confluyen en ello dos corrientes, aparentemente contradictorias, pero que han unido sus fuerzas: el neoliberalismo y el neoconservadurismo"...(LEER EL ARTÍCULO COMPLETO).

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bueno y esclarecedor.

Anónimo dijo...

Claro como el agua. Felicidades.