jueves, 10 de diciembre de 2009

NO ESTÁ EN LA AGENDA

No era necesaria una sentencia del Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgos para saber que "el crucifijo en la escuela pública supone una violación de los derechos de los padres a educar a sus hijos según sus convicciones y de la libertad de religión de los alumnos".
Pero hay gente que no se entera o no quiere darse por enterada. Incluso el Presidente Zapatero ha declarado que la retirada de los crucifijos de las escuelas "no está en la agenda del Gobierno". Quizá el problema sea sólo de agenda; de quién marca la agenda del Gobierno en estos temas. Algunos pensamos que el problema quedaría resuelto si a la larga mano de los Rouco y los Martínez Camino no se le permitiera ni siquiera acercarse a la agenda gubernamental.

5 comentarios:

Feli dijo...

No puedo estar más de acuerdo, Máximo. Lo has dicho clarito y en pocas palabras. Y es que parece que la empatía no es una cualidad del Presidente Zapatero, al menos en este caso. ¿Ha pensado en la cantidad de familias de otras creencias religiosas o no creyentes que sienten en los centros públicos el peso de la hegemonía católica? Niñ@s que salen de sus aulas porque hay clase de religión, carteles por los pasillos de propaganda católica... y en algunos hasta crucifijos...

Peces Barba en Plasencia decía la semana pasada que estaba claro el tema pero que donde la mayoría de familias y profesorado así lo decidan porqué no mantener los crucifijos, "daño no hace", y tan pancho.

Es que son así de delicados y sensibles.

Anónimo dijo...

la educación tiene que ser LAICA...pero laica para todos, la escuela no es ningun lugar donde deba impartirse religión a nadie.
Cuando conviene Europa manda y no hay más que hablar. Para otras, "no entra en la agenda del gobierno". No se trata de que entre o no en la agenda se trata de cumplir la ley y en materia de ley quien manda es el tribunal de Estrasburgo.

eduranr dijo...

Si debe entrar en la agenda del gobierno denunciar el concordato con la santa sede. Quizás con ello ganemos todos y nos dejemos de simplezas y paños calientes. El concordato data de la época franquista y por lo tanto nada tiene que ver con la época constitucional que vivimos. Un estado democrático, laico y plural...

Ángela Rivera dijo...

No es cuestión de agenda,es cuestión de miedo a perder votos.Hoy salía en la prensa el resultado de una encuesta y decía que alrededor del 70% de encuestados están a favor del crucifijo en lugares públicos. Pienso como Emilio que habría que revisar el Concordato completamente arcaico. ángela

Feli dijo...

Está claro que si no está en la agenda es por motivos electorales. Sin embargo creo que el voto no se decide por algo como esto sino por un conjunto de actuaciones y las de tipo socioeconómico son las decisivas a la hora de votar: las prestaciones sociales, la vivienda, sanidad, educación, empleo... Lo demás son adornos.
Lo que sí creo que temen es la bulla que arma la derecha junto a los obispos cuando algo relacionado con la religión o moral católica se toca (en el fondo de la bulla "ideológica" siempre el dinerito como motor, por supuesto).
Lo del concordato es evidente y se viene pidiendo hace tiempo desde la izquierda, pero con o sin concordato, el follón lo seguirán armando. Pero creo que el gobierno tiene que jugársela sabiendo explicar a la ciudadanía qué supone la laicidad, y en este sentido el pensamiento laico tiene mucha fuerza ya que parte del respeto a la diversidad y de sacar del espacio público los elementos que "desunen" como la cuestión religiosa que bastantes tensiones y guerras ha causado a lo largo de la historia.

En resumen: Aprendamos a vivir juntos pensemos lo que pensemos... ¿ni tiene fuerza esta idea si nos la metiéramos en la cabeza?