domingo, 28 de junio de 2009

APORTACIONES DE AFILALÁPIZ A LA LEY DE EDUCACIÓN DE EXTREMADURA (LEEX)

EL CENTRO EN EL DOCUMENTO DE LA LEEX

Aunque el documento de debate de la LEEX recoge a lo largo de los diferentes apartados el papel del centro educativo, lo cierto es que una de las estructuras más importante del Sistema Educativo, el centro escolar, está en el documento desdibujado, indefinido, impreciso y escasamente considerado. Aparece cuando es imprescindible su referencia para desarrollar algún elemento de la estructura del Documento
Debe hacerse una propuesta concreta de modelo de centro escolar del Sistema Educativo Extremeño.
EL CENTRO ESCOLAR, ESPACIO DE DESARROLLO PERSONAL, SOCIAL, COMUNITARIO Y DE CONVIVENCIA
Un nuevo modelo de centro escolar
Proponemos que La futura Ley de Educación de Extremadura recoja y defina un modelo de centro que permita satisfacer las nuevas demandas sociales, ofrezca nuevos servicios y potencie la realización en sus instalaciones de medidas de compensación externa, en el que deben estar presentes nuevos profesionales (educadores, mediadores sociales, trabajadores sociales, monitores de actividades complementarias,...), desvinculando el horario del centro del de sus distintos trabajadores y del alumnado en general.
El centro escolar es:
· Un espacio físico en un entorno geográfico determinado. Participa de las características que ese entorno geográfico marca y a él debe adaptarse.
· Un espacio académico donde se imparten/aprenden conocimientos “científicos”.
· Un espacio educativo en el que se enseñan/asimilan normas, actitudes y valores que conforman una determinada "visión" del mundo.
· Un espacio de desarrollo social en donde se posibilita el acceso a “saberes” y titulaciones que permiten alcanzar objetivos de orden social (acceso a puestos de trabajo, movilidad académica y social…).
· Un espacio de desarrollo comunitario -en ocasiones el único o el más caracterizado del entorno social- desde donde se puede responder a muchas necesidades individuales y sociales de la comunidad en la que se enmarca, mejorando la situación de sus miembros (por ejemplo, conciliación de vida laboral y familiar, políticas sanitarias y alimentarias, equipamientos…) y contribuir a la configuración de referida comunidad (transmitiendo sus valores, sus normas, sus conocimientos, sus tradiciones…)
(… Y más…)

Además de distintas medidas respecto al centro escolar, que incluimos en este documento, también presentamos otras para el sistema educativo extremeño que creemos pueden contribuir a la mejora del mismo y en especial de la Educación y de la Escuela Pública: Plantilla y ratio; Asociacionismo pedagógico y sindical; Educación Infantil como etapa educativa completa de O-6 años; Regular adecuadamente los recursos personales, materiales, organizativos y económicos de Educación Primaria; Descentralización educativa y distritos educativos; Potenciar y primar la acción tutorial; Formación inicial del profesorado; Jefatura del Departamento Didáctico y de Orientación; Elección del Director de Centro; Servicio de Inspección Educativa; Ley financiación, memoria económica y esfuerzo inversor;…
Leer más: http://docs.google.com/View?id=ddc63wgj_421gcsfmvgm

sábado, 6 de junio de 2009

Carta abierta a los “popes” de la Iglesia Católica, especialmente a los españoles.

Si no fuera porque sabemos que la Iglesia Católica es una organización fuerte, sumamente controladora y jerarquizada, diríamos que sus dirigentes son una pandilla de descerebrados que día tras día excretan por sus bocas las mayores barbaridades.

Y si las dicen, no es en balde.

Su deseo de seguir controlando las conciencias individuales de las personas, su ansia de poder (y de dinero), su imposición de criterios, de ritos, su omnipresencia…, especialmente en nuestro país, es espeluznante.

Pero sus declaraciones recientes sobre “moral sexual” sobrepasan bastantes límites.

El señor Cañizares parece que tiene una lista de delitos ordenados, según su propio criterio de gravedad, sin tener en cuenta que en este país, hace tiempo tenemos una Constitución y unas Leyes que la desarrollan, donde están tipificados los delitos y las penas.

No se quiere enterar de que sus declaraciones, y las de otros allegados, son gritos fanáticos y fundamentalistas de una moral que, algunos, quisieran y añoran. Tan desfasada de la realidad que sólo induciría a la risa si no fuera por lo grave y lo doloroso que debe resultar para víctimas vivas, escuchar que el horrible dolor y la pesadilla de su vida entera, son “lo que haya podido pasar en unos cuantos colegios” en relación a los miles de niños desprotegidos y abusados sexualmente por clérigos, obispos y otros, repartidos por todo el mundo.

¡Claro que las relaciones sexuales “son actos para el gozo y el disfrute” y para lo que uno quiera y comparta! Y es un delito penal la violación, así lo contempla la ley, aunque algunos se permitan teorizar o hacer supuestos despenalizadores sobre el tema, como la revista editada por el Arzobispado de Madrid y distribuida con el diario ABC. La violación, además, es un acto de violencia y de imposición y deja secuelas psicológicas y miedo de por vida.

¿Qué van a saber ustedes, los gurús, de relaciones sexuales sanas, si se supone que no las practican y hablan de oídas?


Es un insulto a la inteligencia y a la vergüenza de la mayoría de los ciudadanos de este país (me temo que también para muchos católicos), tener que sufrir y escuchar sus exabruptos y sus furias inquisitoriales.

Y dejen ustedes en paz a las mujeres: su antifeminismo es notorio. Dejen que dispongan de su cuerpo, dejen de ser hiperhipócritas con el tema del aborto y otros. ¿Cuántas guerras hay en estos momentos en el mundo? ¿Cuántos muertos por el hambre y la pobreza? ¿Sabían que los humanos somos ya una plaga para el Planeta gracias a la superpoblación? Y del SIDA que sufren millones de personas inocentes, ¿qué me dicen? ¿que no usen preservativo? ¿Qué hacen ustedes para evitar estos desastres?

Entre otras cosas oponerse al aborto legal y regulado por un estado democrático como el nuestro, que, por cierto, aún mantiene un Concordato con su Estado Vaticano (predemocrático y en parte inconstitucional) donde ustedes mantienen privilegios económicos y sociales.

Nuestros representantes políticos no se atreven a hacer realidad la aconfesionalidad del estado que consagra la Constitución, ni a quitarles sus privilegios abusivos (se recomienda leer el Concordato, que era provisional en 1979) unos por temor a los resultados electorales y otros porque o comparten sus ideas y/o se apoyan en ellos para medrar en sus votos.

Pero ya va siendo hora.